Cuando hablamos de imágenes en blanco y negro, es importante comprender la presencia de tonos de negro profundos y ricos. Aunque puede parecer contraintuitivo, la intensidad del negro en una imagen en blanco y negro es fundamental para su impacto visual y su calidad estética.

El negro puro, o negro 100%, se refiere a las áreas de la imagen que son completamente oscuras, sin ningún detalle visible. Estas áreas se consideran el «punto más bajo» en el rango tonal de una imagen en blanco y negro, estos son esenciales para crear contraste y profundidad en la composición.

El contraste entre el negro puro y los tonos más claros en la imagen crea una sensación de profundidad y drama, añadiendo interés visual y aumentando el impacto emocional de la imagen.

Además, el negro puro contribuye a la legibilidad y claridad de la imagen al proporcionar un fuerte contraste con los tonos más claros y medios.