El formato JPEG, como todos lo sabemos trabaja la imagen en positivo, eso quiere decir que procesa y comprime la imagen, el formato RAW conserva todos los detalles y permite una mayor flexibilidad en la edición.

¿Por qué recomiendo Raw?

·         Calidad superior:  contienen mucha más información, significa que puedes ajustar la exposición, el balance de blancos, los colores y más sin perder calidad.

·         Proceso de edición, inigualable: Puedes trabajar los detalles en sombras y luces, y aplicar efectos sin degradar la imagen.

·         Control sobre el color final:  Este formato te permite realizar ajustes precisos que no serían posibles con un JPEG.

Esto digo a mis estudiantes, siempre:

«Si tu celular toma fotos en RAW, sería lamentable no usarlo».  

Si aprovechas y lo conoces marcarás la diferencia en tus fotografías ante los demás, dándote más herramientas para expresar tu creatividad y capturar momentos con precisión y detalle.