La paciencia es más que una virtud; es la llave que abre la puerta a las imágenes más impactantes. Espera el momento adecuado para capturar la esencia de tu sujeto. Las mejores fotos suelen surgir cuando permites que la escena se desarrolle.

Anticipa

No confundas paciencia con quedarse quieto. Espera, y notarás la verdadera personalidad frente a tu lente.

La paciencia siempre mejora la calidad de tus fotos, transforma su experiencia como fotógrafo. La próxima vez que estén detrás del lente, respire profundamente, observen con calma y dejen que la magia se despliegue.

La paciencia es como el trípode, invisible, es quién sostiene, sobre él capturamos nuestras mejores tomas. En el mundo de la fotografía, donde cada instante es efímero, la paciencia se convierte en nuestro aliado más valioso.

Recuerda: No el que hace más cantidad de disparos, es el que tendrá mejores resultados. Enfócate en la calidad de cada toma.